María Alejandra Acosta es editora de Peces Fuera del Agua y cofundadora de la Comunidad de Oyentes. Escribe textos académicos porque es estudiante, y otros terapéuticos porque es persona.
Cuando invitamos a Radio Ocote a participar en el ciclo de conversaciones dedicado a la escritura para audio teníamos claro algo: queríamos tener un proyecto dedicado al periodismo narrativo, un género de podcast que muchos conocemos por referentes como Radio Ambulante y Las Raras, que pudiera acercarnos a una de las regiones que sentimos más lejanas porque a muchos de nuestros países nos llega poca información desde allí, y que, desde su propia realidad, nos atravesara, que pudiéramos encontrar en lo local de la historia, lo universal (o continental, si se quiere). Que pudiéramos sentir que América Latina también estaba ahí.
Con este encuentro queríamos que en los países desde los que se unen oyentes a los encuentros mensuales pudieran escuchar sus historias y decir “esto me suena familiar”. No para crear empatía con las historias, cosa que no haría falta, sino porque queríamos ver esa parte del continente de la que a veces parece que en el Sur solo sabemos que existe, y que más allá de la política internacional, hay pueblos como los nuestros enfrentados a la desigualdad social, a la ineficacia del Estado, al Estado corrupto, a la vida y a la muerte.
Por eso, una de las cosas que más me conmovió del encuentro en el que nos acompañaron Melissa Rabanales, periodista de Radio Ocote, Carmen Quintela, editora de Agencia Ocote, y Ixmucané Us, investigadora y guionista de La Luciérnaga, fue esa: la de escuchar a quienes se unieron a la charla expresar con emoción lo que significó oír episodios como “No fue el fuego” o “Espejo roto: el drama de las adopciones irregulares en Guatemala” y pensar en lo difícil de crear un episodio donde el dolor está contenido y la denuncia pública contra las instituciones responsables es evidente.
Hice un listado de las características de este podcast que lo convierten en referente y que además, recogen las estrategias y tips mencionados por Melissa, Carmen e Ixmucané al momento de escribir sus guiones:
1. El periodismo narrativo lleva tiempo: Empiezo por esta aclaración por dos razones. La primera, parece que estamos acostumbrados a que el periodismo debe limitarse a lo inmediato, a contar los hechos de forma rápida y muchas veces concreta. La segunda, porque en la labor periodística contar la historia requiere tiempo para reportearla, para encontrar a las protagonistas, y para entender cómo abordarla. Melissa nos contó que muchas de las historias de Radio Ocote solo encuentran su forma una vez se hace la reportería. A pesar de que en su cabeza existe una posible vía para contar la historia, solo después de hablar con sus protagonistas, de escucharlas, de visitar los lugares en donde ocurrieron los hechos, es que puede darle forma al guión. Sin embargo, Carmen y Melissa saben que tampoco pueden dedicarle tanto tiempo a cada episodio, pues publican uno cada dos semanas, y por eso, la labor también constituye una prueba contrarreloj, un desafío para un equipo pequeño, pero que ha logrado organizarse para que el trabajo en equipo juegue a favor.
2. La fuerza de cada historia depende de la reportería: Una de las preguntas recurrentes en nuestros encuentros está relacionada con la forma en que las realizadoras encuentran cómo contar y organizar la historia, además de saber cómo llegar a las fuentes, a los lugares y registrar en audio la mayor información posible que sea útil al episodio. Melissa nos contó que el trabajo más arduo está en la reportería, porque es de allí de donde se obtienen la mayor cantidad de información que le da fuerza a la historia. No es lo mismo, resalta ella, decir algo como narradora de la historia a que alguien que lo vivió, lo cuente. Además, también es importante saber qué más se ha dicho sobre cada historia, si existe, pues esas fuentes terminan por enriquecer el episodio, y sirven para contrastar información recolectada.
3. El trabajo en equipo siempre suma: Aunque parezca obvio, el trabajo en equipo siempre suma a un proyecto como este, que es constante y que tiene el compromiso de publicar episodios periódicamente. Mientras Melissa se encarga de la reportería y de la construcción del guión, Carmen Quintela lo edita. Esa dinámica se da gracias a la confianza que existe entre las integrantes del equipo, y cuando hay desacuerdos, es posible negociar, bien sea por una cuestión de la duración del episodio, de una fuente, de una palabra que suena rara, etc. Por eso, dicen ellas, hay que conversar sobre la historia, sobre su estructura. Y se necesita también oído y criterio para saber qué sobra y qué falta. Así, juntas preparan los episodios y los “redondean”. Finalmente, Alejandra Gutiérrez, fundadora y directora de Agencia Ocote, lo revisa, sugiere cambios y lo aprueba. Melissa se refirió al proceso como “revisión espejo”, que les permite paralelamente ver sugerencias y cambios trazados en el guion.
4. Conseguir financiación y aliados es fundamental para mantener el proyecto vivo: La Agencia Ocote, la casa que aloja Radio Ocote, sabe que es importante conseguir financiación y hacer aliados para poder dar continuidad a los proyectos de periodismo y difusión que se ha planteado. Por eso, Melissa y Carmen recomiendan a quienes tienen proyectos de periodismo alternativo presentarse a fondos de financiación de la cooperación internacional, de ONGs y convocatorias nacionales que estén interesadas en contribuir porque sus líneas de trabajo son afines. Por ejemplo, Ixmucané nos contó del más reciente proyecto de Agencia Ocote, La luciérnaga, que combate la desinformación sobre las vacunas, y produce episodios en lenguas indígenas nativas. A través de sus alianzas con medios locales, logra hacer la difusión de sus episodios en las regiones donde existen comunidades indígenas que hablan estas lenguas, y así garantiza que la información esté disponible para ellas.
5. Apostarle a un proyecto transmedia puede hacer la diferencia: Agencia Ocote apuesta a proyectos transmedia interdisciplinares, explora formatos y los aprovecha como posibilidades y puertas que se abren: cada forma de presentar y nutrir las historias es válida, y funcionan como piezas independientes pero también como un todo. La era del internet y el abanico de opciones ha sido aprovechada por pocos, y Agencia Ocote es uno de ellos. Por eso, navegar por su página web permite acercarse a las historias que escuchamos de otras maneras: a través de las galerías fotográficas, líneas cronológicas, mapas, gráficas… Aunque no todos los episodios cuentan con la variedad de formatos, sus proyectos más icónicos, sí. Échales un ojo: https://www.agenciaocote.com/
A Melissa, a Carmen y a Ixmucané, ¡gracias por acompañarnos en este encuentro, por su disposición y por su espíritu! Esperamos poder verlas y escucharlas de nuevo en una próxima oportunidad.
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